jueves, 31 de mayo de 2018

el agua al cuello.

me transpiran las manos, la veo reírse. me mira a los ojos de esa manera tan
intensa que hace que tenga que mirar para abajo o para arriba pero no directo
a ella. su mirada tiene chispas, está hablando y hay verdad en eso, en lo que
me dice. se le nota. tengo un vaso en la mano y me lo llevo a la boca muy
seguido. hay luces de esas que en los videos se ven blureadas y hay gente
pero están en otra velocidad. su boca es el primer plano de mi mente, la mueve
y de ella salen despedidas palabras como flechas, flechas de esas que van
directo al alma y la atraviesan. la escucho como quien se mete al mar. con la
sensación de estar ante algo enorme e inabarcable y a la vez fascinada por
sentir el cuerpo entero en el agua. todo es liviano por momentos. por otros frío
y peligroso. hay peligro en el mar, porque no veo mas allá de mis pies. y en su
boca hay peligro también. en nuestro encuentro hay peligro, tampoco veo mas
allá de donde estamos paradas en ese preciso momento. de golpe estoy ciega.
apuro el vaso otra vez a la boca, tengo la garganta levemente contraída por un
nudo. ella ríe, yo le devuelvo la sonrisa. total eclipse of the heart. eso suena. la
gente canta a los gritos, yo me hago la graciosa y canto fuerte. ella se rie. otra
vez se ríe. esta disfrutando? esta acá conmigo, esto es real.
creo que todas las personas que llegaron a mi vida fueron por algo- eso dice - y
me agarra algo en la panza. me dirá porque llegue yo?
mientras habla pienso en eso. en nosotras dos luchando contra viento y marea
por no involucrarnos. por no hacer de esto un lugar común. por no pedirnos de
mas, decirnos de mas, sentirnos de mas.

       - pero acá estamos mi amor. yo también lo pienso. que estas acá por
         algo. que llegaste a mi vida como una revolución esperable. esperada.


el nudo en la garganta crece, creo que llega a la panza. me siento un poco
mareada. me acerco a ella para escucharla mejor. la gente sigue en su karaoke
improvisado y cristian castro dice que este amor es azul, como el mar azul.
habla de nosotras? me calmo, estoy en cualquiera. mientras ella me dice al
oido que siente que conmigo crece. yo asiento con la cabeza. eso pienso. yo
también estoy creciendo, que miedo. y esto crece. ella y yo crecemos. hoy su
mano marca la diferencia entre la paz y el mundo exterior. cada vez que la
agarro siento que sostengo un pedacito de cielo. una cueva intima y personal a
la que ir para encontrarme conmigo.
     

       - sostengo tu mano mi amor, la beso, beso tus dedos y todo cae en el
         lugar correcto. empieza y termina el mundo en ese momento.


pero acá estamos, paradas, cerca. riendo. hablando. entrando en la otra sin
pasaporte o permiso. así. intuitivamente. y me siento atravesada por ella, por
este amor insolente que cruzo la raya que no debía. en jaque.
estoy a punto de decirle porque creo que esta acá, en mi vida, ahora mismo.
pero en ese momento pienso en españa. pienso en que sentir todo esto por
ella es hermoso e inconveniente. pienso en que seria capaz de dejar de lado mi
deseo o mi sueño solo por sostenerle la mano. por mirarla. me da nauseas,
estoy mareada. tengo tanto miedo. miedo de perderme en el mar que es su
persona, en la amplitud que me propone, en lo infinito, miedo de nadar hacia
adentro y no saber salir.

disparo una frase. un salvavidas de plomo.

        - te herí mi amor? no quise, no quise perdón. veni. por favor veni.- pero
          es tarde. tus ojos se vuelven oscuros. volves a reirte pero es distinto.hay otra cosa en tus ojos.              hay una mueca rara en tu boca - volve amor,por favor, veni a hablarme de nosotras.


prendes un cigarrillo y yo otro. estoy parada en la orilla de golpe. algo me saco
del agua. de pronto el mar esta helado y me resulta imposible entrar. se fue el
miedo de ahogarme pero ahora hay otro miedo. uno fuerte y desconcertante.
me siento un cachorrito asustado mientras suenan fuegos artificiales que yo
siento que son bombas. llueve fuego. es una guerra? grito para adentro. en mi
mente la estoy abrazando pero en la vida real ella camina enérgicamente para
afuera del bar. yo la sigo.
el exterior huele raro, es la madrugada y algunos de los que estaban en el bar
ahora esperan el colectivo en la puerta. se nota que tomaron de mas y se ríen
entre ellos. de que? ojalá ninguno rompa esa risa con una bala cobarde, eso
pienso.
cruzamos la avenida sin mirar, el aire fresco me devuelve al ahora. la miro y me
doy cuenta que la lastime. la miro y le veo el impacto de bala en el cuerpo. me
siento morir. todo se vuelve rojo, todo es su sangre cayendo sobre avenida
córdoba y yo queriendo frenarla, manchando mis manos de rojo, sintiendo que
la hemorragia es mia. la suya es mía, soy yo. ahí sobre el asfalto derramada mi
desesperación, mi miedo, mi barrera quebrada, mis ganas de gritarle mi amor
adelante de todo el mundo, mis excusas mis intenciones, todo armando un
charco en nuestro pies.
se quiere ir. -quedate. hablemos-. no quiere. pero no quiere irse tampoco, asi
no. por suerte no.
subimos al auto e intento tocarla. no esta ahí. su cuerpo esta del otro lado de
un abismo. todo esfuerzo es vano.
quisiera llorar a gritos. viene en pequeñas ráfagas su perfume. le miro los ojos, el
azul esta oscuro, veo la noche de un invierno en el que tuve frío. pienso en
eso, en que la tristeza tiene color azul.

hace un ratito que estamos acá adentro, el auto nos contiene, hace un minuto
se rió de nosotras, de haber salido así de feliza sin tomar el ultimo fernet. me
da ternura que siempre le falte un trago, no importa la hora. siempre el ultimo
es necesario. una muestra mas de su rebeldía característica. siempre es el
trago que se toma mientras nos sacan de los bares porque ya es de día o el
que conseguimos pidiendo por favor al de la barra que nos lo venda a pesar del
horario o el que nos termina de sellar la borrachera.
volvemos por el trago, el mar esta quieto, el mar y su mano que son la misma
cosa. al movimiento de los dos me entrego. me dejo guiar, me dejo llevar sin
resistencia.
ya no hay nada que pueda hacer, eso pienso. y la mira y sonrío.
o si, puedo hacer algo mas me digo,
mientras la beso
con el agua al cuello.