domingo, 24 de noviembre de 2013

insomnio amoroso.

estoy absolutamente desvelada.
Lupe está al lado mío. compartimos el cuertoestudio. duerme como un angelito, que ronca, pero angelito al fin. las gatas también duermen y quique esta en mis pies, lucha entre su sueño y su curiosidad por ver que hago. yo estoy igual que él.

que hago?

que hago despierta mientras los pajaros, descarados y despóticos, cantan para recibir el día que yo aún no despido.
que hago levantándome de la cama entre la oscuridad para encender un cigarrillo que me dejó mareada y un vaso de coca con tres hielos, medida exacta si me preguntas a mi, para refrescar la coca que está a temperatura ambiente.

apenas se escuchan mas ruidos que los de algunos autos y los arboles golpeándose las manos entre sí producto de una brisa que amenaza ser tormenta pero por ahora se queda en el intento.

que hago?

te pienso. es un impulso. es un sinquerer, es a lo que mi mente me lleva en este espacio que es tan mío como tuyo, porque me abarcas entera.

te recorro en mi cabeza como un mapa de alguna tierra que es nueva y que me trajo a un mundo sin nombre y sin cartel de bienvenida.
Me siento una especie de Colón, sin el corte taza y el atuendo poco feliz, y sin ofrecer estrellitas de colores ni imponer mi religión ni la muerte ni la vida adoctrinada y envuelta en papel de regalo.
este mapa que sos vos, este mundo que ahora es nuestro, me maravilla y me deja en estado de alucinación. recorro día a día los kilómetros y huelo el pasto que es tu piel o el mar que es tu espejo o me quedo inmersa por horas en la profundidad de tus ojos persiguiendo los peces que se cuelan en tus pupilas y te llenan de vida la mirada que es relato y es pasado pero habla de futuro.

que maravilla éste mundo nuevo. viva la patria que somos vos y yo!
y nuestro amor a merced del universo y de la luna eclipsada en Venus que nos unió esa noche.

no quisiera cometer el exabrupto de prometerte nada, no se que hay más alla de donde ven mis ojos y tampoco se que encontraremos a la vuelta de la esquina, pero sé, si sé, que quiero que sea con vos la sorpresa de afrontar la vida como venga, las risas y el olor a plantas mojadas y el balcón en que miramos hacia afuera y los sueños y las garras que nos atan de puro amor a mitad de la noche y nos dejan en paz por saber que existimos en ese instante en que somos uno y no hay mas oxigeno en la tierra que el que inhalamos mecanicamente al unísono, como un reloj de pulsera suizo.

que hago?

enamorada perdida, escribiendo al amor, desconociendo mis patrones que me llevaron siempre a las letras monocromáticas, (perras negras como diría un amigo) a escribirle al desconsuelo, al vacío a la falta de un otro que me complete aunque sea en una pieza imperfecta. vomitando palabras que se lamían las heridas entre sí.
y si! si señores si! ahí estaba yo, a salvo en ese mundo que era otro y que era gris pero conocido y era ficción pero en él no corría el riesgo que corro ahora con estas palabras que quieren creer, que salen disparadas de mis dedos pero a diferencia de las anteriores son blancas y atolondradas y nuevas a estrenar y son casa y cuatro ambientes con patio y terraza y luces de colores, que pintan de navidad todo el año y huelen a pasteles y libros nuevos y a sueños como diría otro amigo.
este mundo es vertiginoso y carnavalesco. es mutante pero a la vez familiar y así.
contradictorio conmigo y con quién supe ser hasta que te vi y entendí que era el momento de bajar el ancla y las defensas.

llegue hasta acá, a conocer tus playas y tus cuevas y se que aun el camino es muy largo, y se que aún no termino de saber quien sos pero se que sos.
sos.
vos sos y, cuando es, es tan claro! que algo en el corazón se parece a la arritmia pero suena a tambor de verano y entonces colores y aroma a jazmín y madrugadas como estas en las que el insomnio me encuentra porque me desperté y es verano y ya se siente en el aire como pasa el invierno que fuí.

lunes, 23 de septiembre de 2013

parte 1.

A. Entro a tu casa y siento la contingencia de días y cambios de piel que pasaron por ese saguan. Todo detenido en el tiempo, salvo el tiempo en sí. Allá, donde debían estar tus huellas ahora se puede sentir el olor a blem que Graciela pasó hace unas horas atrás. Acá, la jugada detenida sobre el ajedrez. Mire el primer peón blanco, y sonreí. después, no se porque, sentí ganas de llorar, Entendí que ese peón estaba como yo, paralizado ante tu partida. Ya no cumpliría su destino, el destino que tu mano le encomendó al adelantarlo... al elegirlo a él de entre todos los de la fila, vaya uno a saber que misión heroica o suicida habría imaginado tu mente para él. ahora ya nadie lo va a saber. Decido guardar todo el juego. Canto tablas cuando la lagrima ya se empieza a caer.



 B. Ella está acá, sentada en su sillón, en el de siempre... al lado está el de él, mi tío se sienta. Nadie se banca el espacio vacío y si no se sentaba él me zambullía yo. tenemos un acuerdo tácito: Todo menos su ausencia. Decía que ella está ahí, acá. La observo, mientras mueve su mano derecha, dibujando un ocho en el aire. Ella mira a todos, a veces participa de la conversación y pocas veces atina con el tema del que se está hablando, pero aún así nosotros la participamos en cada coma, en cada punto, en cada absurdo detalle que se dice. No queremos que se pierda nada, aunque en verdad creo que lo que intentamos es que no se pierda ella. No es quién supo ser, y no hablo de su juventud que quedó hace bastante en el recuerdo, ni hablo de su capacidad motriz que con 90 años se encuentra bastante reducida. Hablo de Irene, la Irene de Tito, la que se prendía sólo con su mirada. Siempre pensé que ellos guardaban un secreto, que algo mayor al amor los hacía cómplices.. Que por esa razón se juraron la eternidad, y hasta el último aire que pudieron tomarle al mundo lo cumplieron. Cómo no ser idealista, romántica y frenética soñadora si pude ver sus miradas, si mire sus manos tocarse, tomarse y elegirse durante años... pasaron huracanes, guerras mudanzas, hijos, lagrimas, se bebieron el mar y comieron juntos del mismo copo de nieve. Hamacaron hijos, criaron perros y guardaron fotos que documentan hoy, un historia de cuento.



 C. Ahora todo cambio, se pierden las cosas, la heladera se congela, se les muere el alma a los rincones que no escuchan tu voz. Tu almohadón lo acomodó Marita en el lugar en el que va, y sin embargo ya no es tu almohadón y ya no está en su sitio aunque lo haya dejado sobre tu sillón, porque ese ya no es un lugar si no es tu lugar... y no. no y no. y mil ejemplos me gritan que NO en la cara. Dejarte ir es una de las tareas mas difíciles. Tu casa, que fue nuestra, es fría. le faltan tus manos a todo lo que toco, o tu voz al ruido, o tu luz a mi noche. Hoy es el primer día que te visito, y estas las primeras palabras que puedo plasmar. ya sos parte del aire, ya sos lo que soy yo, te respiro, te internalizo... me llenas de vida todo el pecho. Ahora entiendo que no vengo a tu casa, porque hoy soy tu casa.

lunes, 2 de septiembre de 2013

de aurículas ventrículos y crash.

acostada. Con el corazón que me late fuerte y con un nudo en la garganta me acorde de esta canción. y te regalo ese pedacito. creo que en algo de lo que hablamos siempre cambie mi opinión. el amor duele. enamorarse duele. y es lógico que así sea porque es poner el cuerpo en carne viva y que sea lo que sea. pero no entiendo otra forma de sentir. Menos que eso no es honesto para mi. Es guardarme del frío y perderme los días envuelta en papel celofán. volverme látex y prefiero no. prefiero que me conmueva tu sonrisa así y quedarme con las ganas del abrazo. prefiero sentir. tantas veces escribí sobre el destiempo que quiero creer o necesito creer que Está no es una más de esas veces. Pero yo también estoy maltrecha. Dolida. descreída. invalida en un punto y convencida de que el amor es para otros. que a mi no me vino en el combo. vale la pena si se me rompe es corazón? claro que si. como dijo Galeano, natural que se me rompa el corazón de tanto usarlo.