martes, 8 de noviembre de 2011

te digo adiós si acaso....

reconocer mis limitaciones que son tantas no me resulta simple... entender que mi cuerpo termina en donde existen extremos y en tanto y en cuanto no puedo volar como materia efímera... ni ser parte del éter... ni simplemente dejar de ser esta que soy
para ser aquel que en destino o futuro o premisa o gracia se encuentra ahora sosteniendo el cabello del que me siento preso...
acaso aquel desea su puesto tanto como yo quisiera ocuparlo? acaso aquel reconoce en tus sombras los colores del cielo... ?
la conclusión aquella de algún compañero de infortunio que halló el consuelo culpando a Dios sobre sus artilugios en el camino del que bien ama pero solo
... sin amada y sin calor...

La lluvia se hizo humana en cada gota y caía tanto como yo y hablaba en mi oído…
en un susurro… en un ruidito apenas, me decía tu nombre…
entonces te busqué…
en el agua que caía reconocía tu luz… ella tan abrupta como vos… tan fresca como vos…
la piedra, el granizo, el despecho del cielo, eso viene después y se lleva el idilio… rompe la simbiosis y quiebra lo nuevo...

vidrios rotos al final de tanta lluvia en la cara...

Escucho el corazón latiendo dentro del envase propuesto para esta vida, una de tantas, los pies arqueados de todas las otras, las que pasaron y las que fui, sugieren pasados en los que tampoco te tuve….

... Te persigo te corro… pero siempre me quedo en el intento del rapto agónico, desesperado… no puedo evitar alcanzarte… para sistemáticamente dejarte ir.

si te retengo, si te sostengo, si te obligo a frenar tus pasos para acompañar los mio terminaría entonces el sentido del viaje… el final de la búsqueda producto del encuentro de tu alma para siempre… no seria capaz…

no puedo hacerlo…

ésta como todas las otras… solo puedo ser quien observa el humo y congela la ceniza cuando todo pasa…

ardiendo en otras manos debo verte… soñando en otros ojos y amándote en aquel que tiene labios y promesas y sabe devorarte hasta hacerte solo piel…
y mis manos entonces se consumen la espera… mis manos juegan y chocan los dedos entre si… apuñalando el deseo que se va en cada uña que no deja de tener el sabor del desvarío…

un desencuentro mas se nos permite…

esta vez es la vez que termina de pasar… no se hace presente en este intento el final de las novelas…
solo otro capitulo que nace y muere para avisar que el que viene debe terminar…

no dan crédito mis ojos ni la luna… ella como yo te siente mía… y lo se porque acompaña mis ciclos, regula el agua y me hace mover como la marea yendo y viniendo, en el sinfín y la espera. sin la sirena varada.
como la luna yo también llego a desaparecer, como ahora… en una oscura noche eterna de tres días…
en un anochecer inacabado…
me retiro hasta del cielo como ella… para pensarte sin mas luces que las que tu recuerdo genera…



Un ciclope de viento una princesa sin cuento una maroma sin gracia
una foto sin vos, una mañana de invierno, un sol en negativo, una sonrisa impostada...
las ganas siempre en stop y mi amor malentendido y repugnante chorreando pena de si…

agotados los recursos… agotados los quizás…






"… Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua…"

1 comentario:

Anónimo dijo...

si si si, sis
leí cíclopes y apareció el capítulo 7