viernes, 11 de noviembre de 2011

DelDestiempo


la luz que vuelve al edificio unos minutos después de que terminó el programa que estuviste esperando toda la semana para ver.

tu equipo gana los últimos tres partidos del campeonato, pero no le alcanza, se va igual a la B, por arrastre de puntos y por recuperar la memoria del juego cuando la competencia se termina.

El trabajo que querías, es tuyo, y la llamada que te lo confirma lo hace justo cuando vos te acabas de subir a un micro para irte a la costa con amigos. no llegas a presentarte a la entrevista. otra vez será.

La señora que entra presurosa a la clínica a llevarle un estudio al doctor que le dijo que sí, que pase a la tarde, que él iba a estar, pero lamentablemente " el doctor acaba de salir, le surgió un inconveniente, no... por hoy no vuelve, si quiere intente mañana o le dejamos el número de la clí....."


La luz del taxi disponible a dos cuadras, hace dos horas que lo esperas, jodete! por no haber ido en auto al recital, ahora al fin te vas a poder ir. Pero tu desilusión es inmensa al ver a una parejita que aparece en la esquina anterior,  irrespetuosos de tu espera y tu soledad, se suben al coche que por esto mirá, por esto, no llego hasta vos, 50 metros le faltaban a lo sumo, y así cuando ya lo sentías tuyo fue de alguien mas..


el cigarrillo que prendes cuando aparece el mozo, doblando entre las mesas, con tu comida en las manos.

el teléfono que suena, constantemente, mientras vos estas en la ducha y salís patinando, desnudo, a buscar la llamada que siempre se corta cuando al fin llegas a atender.


y yo, en la misma lista de situaciones injustas y a destiempo,
escribiéndote aunque no sea momento de que vos lo leas,
aunque no sea momento de que yo lo sienta.
aunque sea tarde para ir a buscarte y sea mas tarde para sentir que me amas.


vos siempre vas a ser la aguja que marca los minutos,
y yo la aguja gorda, lenta, que se consuela con que lleguen las en punto.
para sentirte pasar por mi, todas las horas,
de cada día que transcurre
mientras nuestras ganas se deshacen
en un eterno desencuentro.